-Ocupación:
Actriz.
-Motivos para traerla aquí:
Será una de las grandes, ya es de las mejores de su edad.
-Cine por todos los poros:
Y no lo digo por ser de familia cinéfila. Maggie Gyllenhaal, New York, 1977 hija de, hermana de, actúa como quien respira. Quitando El caballero oscuro que algo fue mal (cuando aparece ella caemos en The Closer) poco se puede reprochar su credibilidad en pantalla. Cualquier personaje lo adopta con naturalidad y sencillez, a lo que ayuda la mirada triste del clan. Al igual que su hermano Jake empezó en las pelis de papá Stephen, la primera Waterland (1992) aquella con Jeremy Irons y Lena Headey que muchos vimos en la tele y nos dejó muy buenas sensaciones, es de lo mejor del director. Una mujer peligrosa (1994) Homegrown (1998) que con ese repartazo no sé por que aún no la he visto, y Maggie ya estaba lista para volar sola. Tras foguearse como secundaria en Cecil B. Demented (2000) y Donnie Darko (2001) y algún título pequeño más deslumbró de pronto por su osadía en Secretary (2002). De ahí a una gran peli como es la primera de George Clooney de dire, Confesiones de una mente peligrosa (2002) y Adaptation (2002) la segunda genialidad de Spike Jonze. Buen año para la chica que desde entonces ha coleccionado directores de peso como John Sayles en Casa de los babys (2003) Mike Newell en Mona Lisa Smile (2003) sin ser tan buenas las películas como las del año anterior. Pero para entonces ya estaba considerada una actriz de solvencia intachable que no ha parado de trabajar, a pesar de casarse con Peter Sarsgaard y ser madre, embarazada actuó en World Trade Center (2006). Antes dejó en su currículum unas cuantas películas a destacar sobre todo Sherrybaby (2006) donde vuelve a encarnar con una verosimilitud que da miedo la protagonista de un drama muy chungo, que la mayoría de las actrices jóvenes no sabrían ni por donde coger. No todo son elogios, también se ha especialzado en filmes sin demasiado interés con reparto coral que en España no llegaron o llegaron con pocas copias. Ellos y ellas (2005) o Criminal (2004) el remake inferior de Nueve Reinas serían dos ejemplos. Sin embargo pocos dudan que junto con otras amigas treintañeras como Zooey Deschanel o Amy Adams serán las que se repartan pronto el pastel de premios. Yo estoy tranquilo mientras siga estando en rarezas maravillosas como Más extraño que la ficción (2006) y la elijan directores como Sam Mendes que cuenta con ella para Away We Go (2009) que llegará en verano. Cuando hay elegancia natural, una cabeza bien puesta y mucho oficio la esperanza no desaparece.
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